El fin de la era del “tetracampeón"

Con la inminente derrota de Colo Colo en la disputa del titulo ante Universidad Católica, se da fin a una época de mucho éxito cuya etapa mas brillante fue el tiempo de Borghi, en el cual se obtuvieron 4 títulos consecutivos de liga nacional (algo que no había ocurrido antes) y una final de Copa Sudamericana (perdida en Chile, dándole el primer torneo Sudamericano a un equipo mexicano).

La gran característica en el manejo de DT que tiene Borghi es la cercanía con los jugadores, como dijo una vez en Boca: “No me gusta gritarles a ellos desde el banco porque cuando era jugador no me gustaba que mi DT lo hiciera”. Este estilo ayudo mucho a tranquilizar a algunos jugadores indisciplinados y enrielarlos hacia el éxito deportivo (Suazo, Mancilla, Valdivia) y darles confianza a los jóvenes para que enfrenten la presión con madurez (Vidal, Sánchez, Fernández, etc.), pero dejo un efecto no deseado: el excesivo ego del camarín. Sin quererlo le dio tanta importancia, equilibro tanto la relación DT-jugadores, que estos, al ser limitados o disciplinados por los DT post-Borghi, les perdieron el respeto, haciendo valer su opinión con mayor fuerza que el del propio entrenador. Y de esa forma, han llegado y salido entrenadores en un tiempo muy corto (Astengo, Barticcioto, Tocalli y Cagna) que a pesar de que han obtenido títulos (salvo Astengo y el último), se han ido en 6 meses o 1 año (Tocalli) debido a que su forma de entrenar, su elección de jugadores y entre otras, no les agradaba a los últimos, haciendo difícil la estancia para los DT.

Otro elemento grave que mato este plantel fue la poca renovación, debido a los malísimos refuerzos que llegaron a la “ruca” de Pedreros. Jugadores como Carucha Fernández, Rodrigo Riquelme, Gino Clara, Javier Cámpora, Matías Quiroga, entre otros que supuestamente llegaban como titulares indiscutidos para el primer equipo terminaron todos en la banca o ni siquiera nominados, por lo que el equipo se nivelo hacia abajo a tal punto que en defensa se depende completamente de un juvenil recién subido hace un año al primer equipo (Sebastián Toro). Sean escogidos por la directiva que sin siquiera revisar antecedentes y solo el precio o por descriterio del cuerpo técnico, estos no aportaron en nada al desarrollo del equipo.

Agregando a lo anterior, se puede hablar de la poca incorporación de los juveniles, desde Borghi (que incluso hacia jugar equipos de juveniles en 1ra) solo ha subido 1 al primer equipo (Toro), los demás que pudieron debutar en el primer equipo fueron a préstamo a otros equipos y los jóvenes refuerzos que han traído no los han usado (Pavéz y Veloso). Si no se les da la continuidad y privilegian a los pobres refuerzos, difícil que rindan y se sientan con confianza, es algo lógico que en el cacique aun no han entendido.

Para terminar, el ultimo factor que veo que ha destrozado esta etapa del equipo “popular” fue la ignorancia de los dirigentes en materia deportiva, ya que no solo tienen poco criterio con los refuerzos, tienen un peor criterio para escoger técnicos basados en moda… para mejorar se requiere un entrenador con capacidad de manejar un camarín con egos y un DT que ha tenido nulo éxito en equipos grandes o 0 experiencia dirigiendo es muy difícil que pueda manejar esta situación. Las consecuencias se ven ahora: baja de nivel, procesos cortados a medias, exigencias distintas que afectan tanto física como mentalmente a los jugadores que tratan de dar lo mejor y aumentan el ego de las “vacas sagradas” del plantel.

La única vía real para terminar con esta situación es partir de 0, no solo con un nuevo entrenador o reteniendo al mismo, sino con una política real deportiva a largo plazo en el que las raíces podridas se corten, se promuevan a las divisiones inferiores (buscando la importancia en perfeccionar su juego en vez de buscar resultados en torneos menores) y traigan pocos refuerzos, pero de calidad real y jóvenes de verdadero potencial y usarlos. Así se puede empezar a destruir este círculo vicioso que en 3 años destruyo en proceso no solo de títulos, sino de una identidad ofensiva de juego no solo destacada en el medio local sino también a nivel internacional.

Saludos