Este año, nuestra generación vio algo que jamás había visto (dentro de varias cosas), esto es, ver a la derecha (Alianza por el Cambio) vencer en una elección presidencial democrática al conglomerado dominante en los últimos 20 años (Concertación). Nuestro actual gobierno está dirigido por Sebastián Piñera, un eterno candidato que desde los 90 trató de alcanzar el 1er cargo, pero por A, B y C motivos que no vamos a discutir en esta columna, no pudo optar al cargo hasta el 2006 (junto con Lavín y Bachelet).
Esta derrota de la actual oposición causó de forma casi inmediatamente su muerte y en este articulo me gustaría decir los factores que, según mi opinión, contribuyeron a su fallecimiento.
1) Falta de Unidad: cuando esta se creo (1987) esta “Concertación de partidos por la Democracia”, como su nombre dice, tenia una proclamación, una idea en común que unió a todo tipo de personas con distintas ideologías, criterios y personalidades: la vuelta de la democracia en Chile.
Una vez ocurrida, pudieron mantenerse unidos durante la transición de la década de los 90, siempre enarbolando la bandera de la democracia y acusando “si votan por la derecha, votan retroceso, votan Pinochet” y funcionaba, ya que la gente aun tenia miedo de los oscuros años de dictadura. Pero con el nuevo siglo, vino otra generación de votantes que ya no creían tanto ese discurso de miedo y querían que la democracia se hiciera completa mediante la “Alternancia en el poder”.
Ante ese escenario, los miembros de la Concerta no tuvieron respuesta, cada partido tenia sus conceptos distintos de otro, incluso entre miembros dentro de los partidos y jamás llegaron a un acuerdo común, ejemplo claro de ello fueron las últimas primarias en las cuales a los rivales de Frei (José Antonio Gómez, MEO no aceptó) se les dio unas condiciones absurdas para realizar las elecciones (debían ser regionales, si en esa región la diferencia de voto era mayor al 20% la primaria terminaba y la primera región fue en la que Frei fue elegido senador). Esta actitud termino dividiendo la Concerta, provocando salidas masivas de partidarios, sin mencionar también los casos de Fernando Flores y Adolfo Zaldivar.
2) Agotamiento: Cualquier gobierno, sea del lado que sea, se agota si se mantiene por un largo plazo, sobre todo si son muchas personas participando de esa burocracia (como en Chile). Sobresueldos, coimas, contratos con familiares, construcciones mal hechas, entre otras son consecuencias de gestiones en que el dinero pasa por muchas manos (Mucha burocracia) y en esos mandos medios se metieron el dinero en el bolsillo, agregando que las empresas contratistas de muchos de esos proyectos utilizaban materiales baratos y construían viviendas pobres (Legendario Caso Copeva, casas Chubi, entre otras) débiles construcciones (Puente Loncomilla), entre otros grandes desastres, que si bien no fueron causados por las autoridades políticas, si tienen responsabilidad por la corrupción de sus empleados.
3) No hubo renovación de ideales ni de personas: al quedarse estancados solo en la bandera de guerra inicial, no hubo nuevas motivaciones, creencias o ideales que llevaran al entonces partido oficialista, se conformaron con eso y se confiaron… como muchos ejemplos que he visto en mi vida, el poder los cegó y les evito ver que había mas allá y solo vieron la siguiente elección. Gracias a eso, ocurrió el desastre llamado Transantiago, el nuevo proyecto de transporte que debería haberse tardado mínimo 15 años en completarse, pero aquí por “arte de magia” se realizo de un día al otro, con buses mutantes que no pasaban por debajo de los puentes o no podían pasar por las pequeñas calles de nuestra capital…. Pregúntale como haría un cambio de sistema de transporte a cualquier persona con un sentido común normal y te dirá: arregla la calle, prepara el terreno antes de poner los buses y sobre todo, prepara a la gente, con los nuevos recorridos y de a poco., pero acá era mostrar los cambios antes de la elección, pésima decisión.
También la falta de nuevas generaciones de militantes se mostró, nunca apostaron por las juventudes, los mismos candidatos de siempre o sus parientes, en el peor de los casos eran famosos. De cualquiera de esta forma nunca se confió en sus propios miembros y una renovación de generaciones e ideas, llevando a la Concerta a un estado vegetal y
4) Falta absoluta de Autocrítica: Aun cuando en algunas discusiones tengan un punto de razón (retraso en la reconstrucción, elección subsecretarios con antecedentes penales, etc.) lo único que ha hecho la actual oposición es lanzar críticas a cuartel (como la actual pataleta de (Andrés Zaldivar criticando la forma de actuar de la ministra Von Baer que, aunque comparto que me desagrada No es la forma), sin siquiera sentarse entre sus miembros a cuestionarse las reales causales de su derrota.
Estos factores fueron esenciales para su derrota, ya que sus peleas internas y discursos antiguos contra la derecha fueron la mejor campaña que pudieron darle a Piñera, que fue lo suficientemente astuto para mantenerse al margen y seguir con lo suyo, asegurando su victoria.
Mientras no haya autocrítica en el conglomerado del arcoiris, no habrá una renovación ni de ideas ni de personas. Por el bien de nuestra actual democracia, la oposición debe renacer de sus cenizas con nuevas caras, probablemente un nuevo nombre y esencialmente volver a tener lo que tuvo hace 23 años, un espíritu de unión y una idea fuerte en común de gobierno que ayude a los problemas que enfrenta nuestro país,
Saludos
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